La oscuridad de la noche se había tragado las horas de la tarde, un gélido viento y llovizna cubrían el atardecer con una capa de frío. Tony y yo volvíamos a casa en el coche y al girar para entrar en nuestra calle, dos policías nos impidieron el paso, obligándonos a retroceder. Tony bajó la ventanilla y les dijo: -¿Qué ocurre? vivimos en la calle siguiente, ¿por qué no podemos pasar?- Hay un fuego en un piso y los bomberos vienen, ningún coche puede pasar...Con mucho miedo aparcamos donde pudimos y volvimos para hablar con ellos, vivíamos en la calle del incendio y podía ser nuestropiso el qué ardía, que nos dejasen pasar, y ellos lo hicieron
Yo no pensé que el fuego podía propagarse a nuestro piso, aunque la virulencia de las llamas, llegaban hasta nuestras ventanas, sólo pensé que Lluvia, nuestra yorkshire, estaba sola en casa y el espeso humo la podía haber asfixiado, y me abracé a Tony diciéndoselo.
ya hacía rato que había dejado de hacerlo…
Tony quiso subir a nuestro piso por ella, pero la policía se lo impidió, lo intentó en tres ocasiones y no le dejaron ni acercarse al portal, era demasiado peligroso.
De pronto la sirena del coche de bomberos se fue acercando…y llegaron dos coches.
Entre la lluvia que caía el ulular de las sirenas y el rojo resplandor de las llamas, no sé como Tony aprovechó el revuelo que ellos formaron, y dando un rodeo entró en el portar
Yo le vi entrando aunque estaba todo lleno de humo negro.
Le grité varias veces que se volviese, que no entrase...
lo mismo que hicieron los vecinos que le vieron, pero él no hizo caso a nadie y desapareció tras la gran boca del portal que vomitaba humo negro.
El tiempo devoraba los minutos.
Y de pronto, sin saber como, Tony apareció a mi lado con Lluvia en los brazos… La palabra milagro estuvo en la boca de todos… ¡Ha sido un milagro! Repetían... Él estaba bien y mi chiquitina viva. Me abracé a los dos llorando, toda la tensión vivida se diluía en lágrimas incontroladas, temblaba, y era incapaz de reaccionar… Ni siquiera me di cuenta, en que momento, los bomberos habían apagado las llamas , y controlaban el fuego
Cuándo volvíamos a casa, Tony me contó que abrió nuestro piso, y en la oscuridad la llamó varias veces, pero ella no aparecía y temió que estuviese muerta, hasta que con la luz del fuego, distinguió que muy despacito se iba acercando a él llorando con ese chillido extraño que nunca la habíamos escuchado.
¡Que había sido un milagro el que a Tony ni a Lluvia no les hubiese ocurrido nada! Pero yo sé, que el verdadero milagro fue el amor, el amor que Tony me demostró al no pensar en él, arriesgando su vida por mí, y por Lluvia.
¡Sí fue un milagro… un milagro de amor!
Realmente fue un milagro de amor sincero. besicos.
ResponderEliminarAngeles, qué suerte he tenido al conocer tu blog. Me encantó todo, las fotografías, la musica y el relato apasionante del incendio, que afortunadamente, terminó bién.
ResponderEliminarYo soy chilena y entré a tu blog por intermedio de Meulén. Te felicito y te invito a mi blog de cuentos que es lillymarmatblogspot.com
No es un blog tan elaborado y lindo como el tuyo pero confío en que si lees algun cuento, te pueda gustar. Yo seguiré leyendo el tuyo. Lillian.
¡Qué alegría! Fue realmente un milagro.
ResponderEliminarNo quiero pensar que a "Fusa" le pasara lo mismo.
Un besazo. QDTB.
Que hermoso acontecimiento dentro de la tragedia , ¡Que heroicidad !, ¡ Cómo no tener fe en los hijos de los hombres,
ResponderEliminar¡Mis más sinceras felicidades a los tres!.
Besos.
Amiga Angeles;ese acto se entiende solamente por amor de Tony hacia ti, porque estoy seguro que
ResponderEliminarsolamente por Lluvia no lo hubiera hecho, y el amor aunque no abunde, no es un milagro porque gracias a Dios aún existe.
Un fuerte abrazo
¡Que maravilloso milagro de Amor!
ResponderEliminarUna historia que encandila.
Un abrazo.
Alguien dijo que solo el amor - A una idea, a un país, a una persona - puede generar heroismo, tu historia es el ejemplo perfecto... Muy bonito.
ResponderEliminarUn beso.
No hay mejor milagro,Ángeles,no lo hay.
ResponderEliminarMe alegra enormemente que el final haya sido así de maravilloso para todos.
Besos.
Angeles cielo que historia tan emocionante y llena de amor,, me alegro de corazon que todo tuvieras un final feliz tu marido fue muy valiente y como tu dices eso si que es Amor.
ResponderEliminartu lluvia es preciosa que Dios te bendiga a ti y a tu familia..
Besos y Sonrisas..que pases un buen domingo
Hola Trimbolera, gracias por llegar hasta mi blog. De que fue un milagro de amor sí que estoy segura, Tony lo hizo posible y lo más hermoso es que tan solo pensó en mí y en Lluvia.
ResponderEliminar¡Un abrazo con estrellas de felicidad, y feliz domingo!
Gracias Lillian, yo no creo en la "casualidad"
ResponderEliminarcreo en la "causalidad" por algún motivo llegaste a mi blog, y esto me alegra, porque me permite acercarme al tuyo, y seguirte, como así haré.
Creo también que cuándo las personas compartimos sentimientos hermosos, nos enriquecemos, y los senderos de la vida se llenan de semillas de luz.
Un abrazo desde un lugar del corazón.
Hola Capuchino de Silos, es mejor que te olvides de que a tu "Fusa" pueda ocurrirla una cosa así, porque no puedes ni imaginar lo que se siente, es verdadero terror, y más cuándo Tony, se metió tras la boca negra del portal.
ResponderEliminar¿Sabes? el salmo de Isaias... " El Señor es mi pastor nada me puede faltar", se hizo fuego, lluvia, viento, humo, miedo, porque era lo único que me repetía en mi interior...
Un abrazo desde mis alas libres de golondrina.
Gracias andré (ya sé porque lo escribes con minúscula) por llegar a mi espacio. El día del incendio, se dieron muchas circunstancias para llegar en ese momento justo, fue propiciado así, para que Tony hiciese lo que hizo... y que asombró a quienes vivían en nuestra calle.
ResponderEliminarY como tú, creo que el AMOR es la única forma que tiene muestro caduco mundo, para avanzar por senderos de luz.
Un fuerte abrazo, y feliz domingo.
Hola José María, gracias por tus acertadas palabras, el amor, como le decía a andré, es el único camino que hoy nos puede ayudar. Yo les digo a todos mis alumnos, que si hacen algo bien o bueno, ese día es algo mejor y bueno... porque ellos lo hicieron posible con sus actos. ¡Y es que es así!
ResponderEliminarUn abrazo para ti, y una lluvia de estrellas de felicidad para Alba.
Gracias Pedro Luis, por acercarte a mi espacio. Aún hoy me hace daño, cuando tengo la visión de Tony, engullido por la negra boca del portal. Y creo que por amor pueden ocurrir cualquier tipo de milagros.
ResponderEliminarUn abrazo, con estrellas de esperanzas
Hola Pablo, que verdades encierran tus palabras, dicen que si todos los hombres del planeta tierra se unieran en un sentimiento común de amor...¡SE PODRÍA CALENTAR EL AGUA DE LOS OCÉANOS! y yo lo creo así.
ResponderEliminar¡En todo acto heroico está el amor...!
¡Un abrazo con brisas de felicidad!
Gracias Marinel, por tus palabras y tu presencia en mi espacio. Es cierto...¿ Te has dado cuenta, que este mundo nuestro tiene el día de... de cualquier cosa, menos EL DÍA DEL AMOR...?
ResponderEliminarY es que al amor se le tiene mucho miedo por las consecuencias que puede desencadenar... Ni pobres, ni torturados, ni humillados, ni gurras, ni abusos, ni muertes, ni robos... SÓLO EL AMOR... (impensable)
Cariños con un abrazo
Gracias Miluna, por dejarme la huella de tus palabras. Hoy al mirar hacia atrás... sólo veo a Tony, entrando en la boca de humo negro que era el portal, el dolor de temer por su vida... y de pronto, tenerles a los dos a mi lado...
ResponderEliminarContinuan existiendo los milagros... y sus raíces están en el amor que damos, o que nos dan.
Besitos y feliz domingo.
Angeles , me has tenido en vilo hasta el final...pero muy hermoso desenlace en el que una vez más vence el amor que nos redime de todo.Un cálido abrazo.
ResponderEliminarBendito milagro y amor de su amo que lograron salvar a tu preciosidad de Lluvia.
ResponderEliminarMenos mal que todo quedo en el tremendo susto.
Besos Angeles.
Angeles, de nuevo aqui en tu hermoso refugio, que impresionante historia, G.D. final feliz. Besos. Martha.
ResponderEliminarQUERIDA ANGELES, ME HA GUSTADO MAS QUE NADA, EL FINAL TAN FELIZ DE LA MISMA... ¡QUE BONITO TU
ResponderEliminarQUERIDO PERRO Y QUE SUERTE HA TENIDO DE PODER SOBREVIVIR Y QUE MIEDO PASARIAIS LOS DOS...TU Y TU ESPOSO...
UN ABRAZO CONCHITA
Hola Ángeles, una historia maravillosa y triste a la vez, con un final superior y agradable. El amor que siente tu marido por ti es envidiable. La perrita es digna de ser salvada, tiene una carita preciosa, se merece los amos que tiene.
ResponderEliminarMe alegro que hubiese un final feliz.
Un abrazo muy fuerte.
¡Qué susto! Me nos mal que no les paso nada, ya puedes dar gracias a Dios.
ResponderEliminarUn abrazo
Querida Ángeles,pobrecita perrita ,¡que mal lo pasaria!,viéndose en ese infierno.
ResponderEliminarEs un relato lleno de hermosa historia de amor hacia ti y hacia esa bellísima criatura llamada "LLUVIA". Enhorabuena y me alegro que todo se quedara en un susto, muy grande, pero un gran susto.
Un abrazo.
Un relato impresionante y de actualidad, Ha sido un verdadero milagro, sobre todo gracias al arrojo de tu marido, que fué capaz de pasar por la barrera de fuego. Felicidades. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Juan, gracias por tus palabras en mi blog, es cierto que el amor te pone alas, y vuelas sin temor. ¿Te das cuenta del poder que podríamos tener los humanos si nos dejáramos llevar por este sentimiento...?
ResponderEliminarUn abrazo con brisas de felicidad.
Tienes razón Rafaela, hoy Lluvia continua con nosotros, porque Tony tuvo el valor o la locura de subir por una escalera que era una trampa mortal, pero lo hizo sin pensarlo como él dice, solo penso en mí y en Lluvia.
ResponderEliminarCariños, con un abrazo
Martha cariño, ¿dónde has estado? siempre que quería ir a tu blog, me decía que yo no había sido invitada a ese lugar... Por eso me alegra el poder volver a retomar nuestra amistad virtual. Gracias por llegar hasta mi blog.
ResponderEliminarDesde el comienzo del arco iris, te envio una lluvia de felicidad.
Ay Conchita, no puedes imaginar el terror que yo tuve, cuándo vi que Tony entraba en el portal... No quiero ni recordarlo.
ResponderEliminarPero lo que sí recuerdo y sé, es el amor que demostró con su valentía o su locura, porque entró a la desesperada, creyendo que lluvia estaría muerta. Gracias a Dios su pequeño cuerpo, y donde estuviese metida, porque está siempre libre por todo el piso, hicieron parte del milagro.
Un abrazo con mi cariño.
Hola palabras al viento, es cierto que Lluvia es un pequeñín ser de luz, que nos da todo su amor siempre. Y también es cierto que ella se refugió en algún lugar donde viese que había menos humo, y luego el que Tony, sin pensar en que podría haberle pasado algo, subir por ella.
ResponderEliminarDesde entonces creo que todo tenemos un ángel de la guarda... incluidos los perritos.
Un abrazo con esrellas de felicidad.
Hola Chelo, el susto fue muy grande, y aunque tuvimos que pintar el piso, que estaba negro del humo, y remover y lavar todo. Cuándo me cansaba, cogía a Lluvia en mis brazos y viéndola ya bien, lo demás no me importaba.
ResponderEliminarCariños desde un lugar del corazón.
Gracias halconcien por las palabras que me dejas en mi blog. Es cierto que lo pasé muy mal, parecía que estaba viviendo una pesadilla... con un escenario irreal.
ResponderEliminarSólo comencé a tranquilizarme cuando la veterinaria nos dijo que solo tenía mucho terror, y nos preguntamos donde se metería para huir del humo negro que entraba por las ventanas.
Un abrazo con rayos de felicidad.
Gracias Olegario por las palabras que me dejas en mi blog. Ahora mismo, si vieses a esta pequeña perrita, ladrando a pleno pulmón, porque es la hora de su cena, y yo estoy aquí con el ordenador...
ResponderEliminarNo sé como se dieron tantas "causalidades" para llegar en el momento justo, y poder subir a rescatarla, también en el momento ideal, con el despiste de la policía y los bomberos que llegaban.
Un abrazo con estrellas de felicidad
Hola, Ángeles:
ResponderEliminarVerdaderamente el amor hace milagros y la fe mueve montañas. Gracias a Dios no hubo nada que lamentar, lo material se recupera, la vida no.
Un abrazo.
Ay mujer, que me emocionas hasta el tuétano, por esa prueba de amor tan grande de tu Tony, porque el sabía lo que era esa pequeñina para ti.
ResponderEliminarEres muy afortunada Angeles por tener a tenerles a tu lado, indiscutiblemente Dios está al lado de los que aman.
Un fuerte abrazo con cariño.
¡¡Emotivo relato!! Al principio pensé que era imaginado, pero luego, al leer los comentarios, he visto que es real. ¡Qué miedo pasarías! Imagino que fue una experiencia muy dura, aunque con final feliz. Mucho el valor de tu esposo, arriesgando su vida por tí y por la perrita. Tu blog sigue siendo como un esbozo de un país de cuento de hadas,muy bello. UN beso
ResponderEliminarEs cierto lo que dices Rafael, lo importante es la vida que todo lo demás se puede recuperar. No me importó tener que pintar todo el piso, teníamos a Lluvia, que era un regalo de nuestra hija, y su presencia un regalo de Dios.
ResponderEliminarUn abrazo desde un lugar del corazón.
Alborada, sé que fue un milagro de Dios, se dieron muchas "causalidades" para salvar a Lluvia en ese preciso momento, porque después de la llegada de los bomberos, en tres horas, nadie pudo entrar en sus pisos. Vivo encima de un centro Comercial, y todo el cuadro electrico de él, está en el último piso, y tuvieron que revisarlo todo. Y estoy convencida, que LLuvia no hubiese aguantado tres horas más.
ResponderEliminarLos milagros continuan existiendo, y están siempre basados en el amor.
Un abrazo grande, y mil gracias por tus palabras de cariño.
Hola Francisca, gracias por tu comentario. Todo fue real, y mucho peor, porque con la lluvia que estaba cayendo y sin luz eléctrica, sólo nos veíamos con el resplandor de las llamas... Y era como una visión apocalíptica.
ResponderEliminarRaquel, mi vecina me dijo que hacía mucho que Lluvia ya no ladraba... Tony subió por ella, creyendo también que había muerto. Que estuviese viva, fue un verdadero milagro, como lo fue, que a él no le ocurriese nada.
A veces "Dios escribe derecho con renglones torcidos..."
Cariños con un abrazo
Amiga Ángeles, tu blog está lleno de historias sorprendentes y, en muchos casos, verídicas.
ResponderEliminarUn milagro ha sido, sí; pero más que un milagro ha sido coraje, amor a los animales y amor hacia ti por parte de tu marido.
Me alegra saber que todo acabó bien.. El fuego es horrible y los incendios destruyen todo y luego queda la reconstrucción.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
Ángeles:
ResponderEliminarEl fuego suele ser fatal, te lo dice alguien que trabaja en la industria del gas natural y que sabe de los estragos que causa un incendio.
Hubo una gran fortuna en que tu esposo no saliese dañado y lo mismo le cabe a la mascota. Él sabía cuánto querías a ese animalito.
En casa hay un caniche toy que es un malcriado completo, con quien todos tenemos un enorme cariño, que empequeñece ante su lealtad y amor hacia nosotros.
Allá por 1981 o 1982, hubo un incendio en un local cercano a la torre donde vivíamos por entonces. Vimos la situación desde el balcón del piso doce, ya que nos despertaron las sirenas de los bomberos. Al rato, bajamos a la calle y miramos -junto a los restantes vecinos- cómo trabajaban los servidores públicos.
Nos causó muchisima gracia ver a una mujer en camisón, que sostenía una percha... con su abrigo de pieles.
Un gran abrazo.
Un relato desde luego espeluznante. Menos mal que todo salio bien, y no hubo que lamentar desgracias. Impactante historia, que desde luego no será fácil borrar de la mente.
ResponderEliminarUn abrazo Ángeles.
Desde luego fue un milagro de amor. Pero si tu marido tiene que, eventualmente, ir a buscar un peligro, no le pierdas de vista y agárrate a él para que no vaya porque lo que has contado me ha dejado perplejo.
ResponderEliminarA veces no pensamos en nosotros mismos, y nos metemos de cabeza en la boca del lobo sin pensar en que las consecuencias se nos pueden o, mejor, muy probablemente se nos vayan de las manos.
Hola Mos, casi todos mis relatos son experiencias vividas... muchas veces, por mi trabajo, y otras porque conocen mi trabajo, vivo momentos de mucha felicidad, o de tristeza sin antídoto.
ResponderEliminarLo que si creo siempre, que con el AMOR por faro en nustras vidas, se pueden hacer pequeños milagros que llenan de felicidad a quienes lo reciben.
Un abrazo
Gracias Arturo por llegar hasta mi blog, y las palabras que dejas en él. Yo tengo terror al fuego, quizá porque de niña, vi llorar a mi padre cuándo incendiaban las cosechas porque "el cacique de turno" quería la dehesa para su coto privado, y la mejor manera de echar a un campesino de ellas, era quemar su trabajo...
ResponderEliminarCon Lluvia sé que ocurrió un verdadero milagro cuándo hacía tiempo que ya no se la oía ladrar... es como tu caniche, una mimosa y zalamera, un cascabel de risas y lametones cuando huele el chocolate, que es su pasión. Nos da muchas alegrías y es un gozo ver como juega con todos nosotros.
Me has hecho sonreir con la señora que salvaba su abrigo de pieles del incendio en su vivienda, y es que cada persona tiene una escala de prioridades... y valores.
Hola Rafa, gracias por tus palabras en mi espacio. Si fueron unas horas de auténtico terror, porque en la oscuridad, no se veía nada más que las llamas que salían de las ventanas.
ResponderEliminarY el que Lluvia, estuviese escondida, en no sé que lugar del piso, y lo chiquitina que es, fue lo que la salvó, pero no creo que hubiese resistido mucho más tiempo, eso fue lo que nos dijo su veterinaria.
Un abrazo.
Gracias por tus palabras dafd, es verdad que Tony no miró las consecuencias, que podían haberle hecho peligrar su vida, por la cantidad de humo negro que salía del portal. y podían haberle intoxicado. Sólo pensó en Lluvia, en mí, y en lo que dijo mi amiga Raquel, que había ladrado mucho, pero hacía tiempo que ya no lo hacía.
ResponderEliminarAunque sigo pensando que quizá tuvo que pasar, aunque no consigo encontar las respuestas.
Feliz fin de semana con un abrazo
Excelente narración para contar tan espeluznante episodio. El fuego es terrorífico y, desdeluego, fue un milagro que tanto la perrita como Tony saliesen indegnes de la horrible situación.
ResponderEliminarFeliz domingo y besos. María
Perdón, por favor; me salió una errata: (indennes)
ResponderEliminarAngeles.." Y ocurriò un milagro "
ResponderEliminarComo has relatado esto asusta, màs viviendo en edificios altos.
Que alegrìa al ver aparecer a Tony y tu perrita, habìas pensado lo peor.
¡¡¡ impecable !!
un beso
La verdad es que el amor por los animales hace milagros y en este caso, fue el amor hacia ti y tu perrita
ResponderEliminarMe pongo en tu lugar y se lo que debiste pasar, pero has de estar feliz porque todo gracias a Dios salio bien
Un abrazo enorme para los tres
Ángeles,me paso de nuevo por tu blog para desearte un feliz dia en compañia de los tuyos. Besos y un abrazo.
ResponderEliminarHola María, perdonad que no haya podido responderos antes a ninguno, he tenido una gripe de "elefante" y no he podido, ya voy estando mejor.
ResponderEliminarGracias por tus palabras en mi espacio, es cierto que el fuego es aterrador y más cuando es en un piso, que arden todos tus recuerdos... El poder tener hoy a Lluvia, si fue un auténtico milagro, que siempre recordaremos.
Un beso y feliz día.
Gracias Doris por tus palabras en mi blog. Y sí, estuve muy asustada, primero fue por Lluvia, pero cuándo vi a Tony subir por la escalera llena de humo... ahí sí que las lágrimas me desbordaron.
ResponderEliminarHoy, todo ha quedado atrás como un mal recuerdo que un acto de amor, cambió en felicidad.
Mi cariño con un abrazo.
Doris, se me olvidó decirte que no te he podido contestar antes, por culpa de una gripe, que me ha tenido derrotada.
ResponderEliminarUn abrazo con estrellas de felicidad.
Gracias Marian por dejarme la huella de tus palabras. Es cierto que Lluvia es para todos un animal, que nos llena con su ternura, sus travesuras, o sus juegos... y creimos haberla perdido, gracias a Dios, ocurrió el milagro de poder recuperarla, y que no la hubiese pasado nada.
ResponderEliminarUn abrazo desde un lugar del corazón.
Hola halconcien, te digo como a estos últimos amigos, perdona que no te haya respondido antes, he estado y estoy aún un mucho y un menos "griposa" por eso no te he contestado antes.
ResponderEliminarGracias por tus deseos de felicidad, felicidad que te envio yo también, con un abrazo.