MI COFRE DE SUEÑOS

 

¡Hace frío, mucho frío, los árboles desnudos lloran, envueltos en una neblina de agua helada perlados de escacha, y el carámbano teje alburas de frío cristal sobre la tierra... La Reina del Invierno salió hace tiempo de su palacio de hielos y escarchas desde las cumbres del país de las Heladas Tierras del Norte, y bajando por las torrenteras, por los ventisqueros, por los riscos...con su manto de gélido armiño, en remolinos de niveas estrellas de nata, comenzó a bailar su danza de copos de nieve dejando sus huellas de frío y días reducidos de luz, por todos los lugares que recorre... 

 La vida dormita bajo su manto blanco, y se esconde en una burbuja de sueños, hibernando como crisálidas que renacerán con nuevas alas. El silencio se adueña de ella, esperando la calidez de su nuevo despertar en los días luminosos y de nuevas esperanzas Ahora el sol con su estallido de luz, habita lejos, muy lejos, en La Montaña de Oro, y desde allí envía su luz y calor al Universo Invertido, en el eterno fluir de la rotación intemporal de las estaciones, desde el lejano albor de la vida

¡Por eso llega La Reina del Invierno a la tierra que habitamos… aunque muchas veces con su gélida sabiduría se ha adelantado en silencio, reptando sigilosa y ha hundido sus raíces de fría nieve en el alma de las personas para robarlas la luz que ella no tiene, y así las lleva al abismo negro de la depresión, donde se desangran los sentimientos desbordados entre brumas, lágrimas y días de oscura melancolía.

 Con los últimos rayos del sol del otoño, guarde en mi cofre mágico de sueños, los más luminosos...sé que están en él... y con ellos puedo tejer la esperanza con su manto de oro y cálido calor, que me abrigue en estos días que Nieve Blanca aparece y me hace sentir en el alma herida, el frío de su danza y el frío de la soledad... Sé que puedo volver a entintar bruñidas estrellas de matices dorados, puedo alejar el miedo que esparce cuando con su amigo El Viento, ruge con su voz cavernosa sembrando sólo frías y oscuras tinieblas…¡con la esperanza en mi alma, puedo soñar con las orillas de otro tiempo de luz que llegará y me acunará con la embriagada fragancia de los pétalos de la rosa más bella…!Y es que en mi cofre mágico guardo todas las cosas que yo quiero, porque él está en mi alma y el alma es la tejedora de los sueños que nunca perecen, y me acarician como la fresca hierba en una noche de verano llena de estrellas. Ya estoy tocando esos rayos de sol que guardé,

y siento en mis manos la calidez de su contacto...! La esperanza difuminará el frío glacial, la soledad y los días brumosos cuando el alma llora en silencio, cuando todo en la vida parece oscuro y triste, cuando el desamor y la traición afilan sus garras para su cacería de negro dolor hiriente…Nieve Blanca... sé que tus zapatos de cristal terminarán ajados, rotos, te marcharás desterrada y volverá a brillar el sol con todo su fulgor en la tierra esquilmada por tus gélidas heladas y en las vidas donde anidaron las brumas de tus pasos >Baila, baila tu danza escarchada, me he vestido con el talar de la esperanza y el miedo ha huido exiliado al piélago muerto del olvido.

¡ Tu helado aliento, no podrá nunca deshilar mis sueños de luz, porque la luz siempre vencerá a la yerma oscuridad !