Desde esta gran ciudad donde vivo, grande, hermosa, bella, llena de casi todo…hay veces que siento una llamada urgente en mi alma, para retornar a mis sencillos orígenes, es una necesidad casi dolorosa, es hambre de llenarse de vitaminas que sólo en mi tierra encuentro, entonces cuando puedo me marcho allí un fin de semana y con mi mochila y mis botas de “siete leguas” me “pierdo” por los lugares por los que anteriormente he decidido ir. Es pisar mi tierra, es respirar mi aire, es ver la pureza de mi cielo, las aguas cristalinas de sus ríos y ya me salen alas para volar como una golondrina por donde deseo, en vuelos rasantes, llenos de armonías y serenidades…
Me seduce perderme por los lugares casi vírgenes, donde tan sólo encuentro mis huellas, es volver por senderos perdidos que habitan en la memoria de mi alma y donde sólo se puede escuchar las voces de la naturaleza que susurran a mi alma secretos y vivencias de ecos pasados y vividos… ¡mi Extremadura, tierra donde nacían los dioses!
Este verano he vuelto en tres ocasiones al Castro de la Muralla de Valdehúncar, es un lugar mágico para mí, increíblemente maravilloso, es saber que estoy pisando el mismo suelo, tocando las mismas piedras, que antepasados míos hicieron hace miles de años… es encontrar trozos de cerámica que aún están allí, y me han esperado durante esos miles de años, sin que nadie ni nada les haya movido de su lugar desde el III milenio A.C. ¡ es una gozada que pone alas a mi alma, aunque el lugar sea de muy difícil acceso porque hay que bajar más de 1 km en picado hacia el río Tajo, pero estar allí es una experiencia única que desborda los sentimientos !
La Muralla, es lo que queda de un castro enclavado en la parte derecha de uno de los meandros que forma el río Tajo en el Embalse de Valdecañas. Su origen se remonta a la Edad del Cobre, aunque las murallas que le rodean, coinciden con la Edad del Bronce. Aún existen dos cuevas y varios abrigos, y estar allí, es como retroceder en el tiempo, cerrar los ojos y escuchar las voces de los hombres que vivieron en ese lugar, en ocasiones he sentido como las lágrimas corrían por mis mejillas...Sólo siento que es como conectar con un pasado hecho presente a través de los siglos, ¡vibrar con las almas de hombres, mujeres, niños, que nacieron, vivieron, amaron, pelearon, y murieron en este lugar! Tocar sus cobijos, introducirme en ellos, palpar su tierra…Ver amanecer desde la Muralla subida en sus enormes piedras graníticas, es una de las bellezas más impresionantes que he vivido, es como asistir al origen de la Creación… ¡Es ver hacerse la luz desde el infinito!
En el castro se recogen testimonios poblacionales, que abarcan desde el Neolítico a la Edad Media. Posee murallas, pero debido al estado de ruina resulta muy difícil discernir a simple vista qué paños corresponden a una época u otra, pues fue reutilizado en el Bronce Pleno, durante la Edad del Hierro, en el Bajo Imperio Romano y durante la Reconquista. Hoy unas veces sumergido bajo el agua y otras al descubierto, han borrado muchos vestigios de su entorno, pero aún así, impresiona y extasía el lugar.
En el castro se recogen testimonios poblacionales, que abarcan desde el Neolítico a la Edad Media. Posee murallas, pero debido al estado de ruina resulta muy difícil discernir a simple vista qué paños corresponden a una época u otra, pues fue reutilizado en el Bronce Pleno, durante la Edad del Hierro, en el Bajo Imperio Romano y durante la Reconquista. Hoy unas veces sumergido bajo el agua y otras al descubierto, han borrado muchos vestigios de su entorno, pero aún así, impresiona y extasía el lugar.
Porque lo cierto es que es un asentamiento ocupado desde el Neolítico, E. Cobre-E. Bronce-Romanos, hasta la Reconquista y el Islam.
Abarca desde el III milenio A.C. al S. XII.
Está situado en un meandro del río Tajo, 5 kms. Al sur de Valdehúncar. Y 11 kms de Navalmoral de la Mata. (Cáceres)
Como valor arqueológico, está abandonado, porque el yacimiento está siendo erosionado por los continuos aumentos y descensos de nivel del pantano de Valdecañas y su estado es de abandono y ruina total.
¡Y lo doloroso es que este enclave arqueológico desaparecerá, está siendo engullido y demolido por las aguas y pronto sólo quedarán algunas de sus inmensas piedras de granito, como testimonio de un pasado que no se debería olvidar ni perder porque forma parte de nuestra historia y nuestros orígenes...!
Angeles,es inevitable leerte,sé que tienes poco tiempo,por eso no vienes a nuestros blogs...Me encanta cómo nos describes tus paisajes,cómo nos llenas el alma,cómo nos impulsas en tu vuelo,mágico y sentido...
ResponderEliminarEs una gozada leerte,te derramas en cada post y nos dejas tu mente y tu corazón,tu pensamiento unido a tu sentir,que se eleva en puro arte.
Mi felicitación y mi abrazo grande por tu amor a tu tierra y a tus letras,amiga.
M.Jésús
Hola!!! Buena señal el que estés por aquí.
ResponderEliminarYa sabes que me gusta leerte por lo que cuentas y por como lo cuentas.
Hoy te voy a presentar a mi amigo Felipe que es un estupendo cronista de viajes y de vez en cuando nos habla de tu tierra.
Te dejo este enlace
Desde mi mejana
Espero te guste y le sigas
Un abrazo
Estupendo relato Angeles. No conozco la zona objeto de tu entrada pero trataré de visitarla.
ResponderEliminarEspero que te repongas completa y rápidamente para seguir leyendo tus escritos. Yo no sé cómo agradecer a nuestra amiga Chelo los elogios que me dirige. Me demuestra que me tiene un gran aprecio y me quiere bien. Un abrazo
Angeles,gracias por tu visita,es un honor recibirte y sentirte cerca.
ResponderEliminarMi abrazo siempre,amiga.
M.Jesús
Hola M. Jesús, mil gracias por tus palabras, son como gotas de luz que acarician el alma, y más ahora que estoy un poco triste. Ya te he contestado en tu blog, tengo inmovilizada la mano derecha y escribo con dos dedos de la izquierda, porque me hice un esguince con rotura fibrilar. Y como escribo muy lentamente, pues las entradas a mi blog han bajado y los comentarios en los vuestros lo mismo. Te aprecio mucho M. Jesús, tienes una luz inmensa en tu alma y me alegro infinito el haberte conocido aunque sólo sea virtualmente.
ResponderEliminarUn abrazo con una lluvia de felicidad.
Hola Chelo gracias por estar siempre en mi espacio, me transmites una paz inmensa con tus comentarios, y más en estos días que estoy un poco triste. No, aún continuo con mi mano igual, mañana creo que me quitarán ya todo y debo hacer rehabilitación.
ResponderEliminar¿Sabes que el domingo pasado estuve en tu pueblo? nos equivocamos de salida en la carretera y aparecimos allí.
Un gran abrazo Chelo y siempre mi cariño
Hola Felipe, gracias por tus palabras a mi entrada. Ya he estado antes en tu espacio y te he contestado en él. ¿ pero si tú eres de Tudela, como conoces tan bien Extremadura...? Ademas eres un guia único, describes los lugares con una precisión de palabras que parece que quien los lee, está allí.
ResponderEliminarY de Chelo yo también sólo puedo tenerla un cariño especial, porque es como mi "Hada Madrina".
Un abrazo desde la distancia.
Hola M. Jesús, puedo afirmarte que si hay honor en visitar un blog, es igualmente tuyo este privilegio. Cuando te encuentro en el mío, tus palabras emanan lo que viste tu alma, integridad, honestidad, y hasta muchas veces gotitas de ternura que acarician el alma, ya te lo he dicho más veces porque así lo intuyo y lo siento.
ResponderEliminar¡Qué una lluvia de felicidad te acaricie el alma!
Maravilloso tu comentario acerca de tus paisajes favoritos, tan bellamente iluminados por esa cámara prodigiosa que te acompaña.Cuantos recuerdos vendrán a tu mente cada vez que te sientas en el Castro de la Muralla de Valdehúncar, recordando tu infancia. Volver al pasado es una lección
ResponderEliminarmagistral en el aula de nuestra vida. Un abrazo.
Extremeñaaaa..."p´aquí" vengo a quedarme y seguir lo que cuentas de nuestra querida tierra. Que la pobre con lo hermosa que es está muy olvidada.
ResponderEliminarQue bonito lo que has contado de ella!!
He ido varias veces a tu pueblo, de visita. Donde vives ahora?
Cuando vuelvas a mi blog, entra en etiquetas hay cinco entradas dedicadas a Extremadura hay que dar publicidad al terruño:))
Espero que tu mano vaya mejor.
Un beso paisana.
es precioso este lugar y sip mágico para mi es el del valle de las mariposas que a hora no recuerdo si esta en galicia o asturias pereo tan bien es precioso gracias por compartir tu lugar de paz que siempre que estés baja de ánimos piensa en ese lugar y cargaras pilas como se suele decir.
ResponderEliminares una lastima que la belleza de la naturaleza este siendo destrozada un fuerte y cordial abrazo
Gracias por permitir conocer tan hermoso lugar. Muy bello.
ResponderEliminarGracias por seguir mi blog, espero me visites para que leas algunos de mis escritos.
Bello tu blog, te felicito.
Besitos de Arte.
¡Gracias Ángeles, leerte es poder disfrutar
ResponderEliminarde la naturaleza, envolvernos de Dios.
¡Que bonita tu tierra!
¡Muchas gracias !
Un abrazo.
Dios te bendiga.
Hola Olegario gracias por estar en mi espacio con tus palabras. Es cierto que hay lugares y personas que siempre estarán en nuestra alma, como el cálido nido donde se cobijan. Y aunque pasen los años nos acompañan por siempre. Yo personalmaente siempre me he sentido en perfecta comunión con la naturaleza, y siempre decubro y experimento nuevas emociones y sentimientos cuando me reencuentro con ella. La necesito para ser yo plena.
ResponderEliminarUn abrazo con cariño.
Laura, gracias por llegar hasta mi blog... Te respondo a tus preguntas. Hace tiempo que resido en Madrid, pues mis padres emigraron siendo yo una adolescente, pero siempre que he podido he vuelto a mi pueblo. Allí tengo mi casa, familia, amigos, y sobre todo un amor inmenso a mis raices, y a miles de recuerdos que con un dolor inmenso dejé atras, cuando creía que me iba para siempre de él.
ResponderEliminarMe encanta Extremadura, sus gentes sencillas, integras y trabajadoras, sus paisajes, la pureza de su cielo, de sus aguas. Respirar esa paz y armonía que emana de cada lugar.
Tienes toda la razón Laura cuando dices que es bellísima, y llena de historia y monumentos.
He estado en tu blog, y he entrado en tus etiquetas, me han encantado, continuaré visitándote.
Un abrazo con todo mi cariño
Hola Laura, se me ha olvidado la pregunta que me haces sobre mi mano... Estoy mejor, mañana comienzo la rehabilitación, porque ahora además del esguince creo que tengo salido el líquido sinovial, y por eso me duele tanto y está tan hinchada la mano. Pero sé que se pondrá bien muy pronto, ya me han quitado la inmovilización y ahora estoy ya escribiendo con las dos manos. Gracias por preguntarme como estoy, eres un sol.
ResponderEliminarUna lluvia de felicidad te envuelva siempre.
Hola hadama, siempre tienes unas lindas palabras para dejar como huellas. Es cierto que en mi tierra recargo las pilas, medito, me relajo, y me lleno de "vitaminas para el alma". ¿Sabes que tengo más de 50 bonsais aquí en mi piso de Madrid, hechos con árboles de Extremadura? Algunos son increiblemente bellos, exuberantes, maravillosos. He tenido que aprender todo sobre los bonsais, hacer cursos, leer muchos libros sobre ellos, para poder cultivarlos y mantenerlos, pero son de una belleza impresionante, y hasta producen sus frutos diminutos, ¡es una auténtica gozada!
ResponderEliminarUn abrazo con mi cariño.
Gracias a ti Arte, por llegar hasta mi blog. Me encantó lo que leí en tu espacio, y volveré. Además creo que todos nos podemos enriquecer unos de otros cuando compartimos lo que nos sale del alma, y cada persona es un mundo de sentimientos y vivencias, que forman su mayor tesoro.
ResponderEliminarUn abrazo con mi csriño.
¡Ay Marian, siempre dejas una huella de luz, admiro tu fe, y ese don tuyo de dejar que desde tu alma se pueda ver a Dios, porque le encuentras en todas partes, y en mi tierra dicen..."¡De la abundancia del corazón, habla la boca!"
ResponderEliminarTenerte como seguidora es todo un privilegio. ¡Qué nunca pierdas esa luz! ¿te digo un secreto? unas palabras que dijo Jesús de Nazaret..."La luz no se os ha dado para esconderla debajo de un celemín...sí no para que todos la vean brillar..."
Un abrazo con mi cariño, desde la luz que nos envuelve a todos.
Hola Ängeles, tu Extremadura debe de ser una gozada, ¿Cuanto me gustaría poder conocerla?,aunque con tus fotos y relatos, uno se va haciendo una idea. Gracias
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Es precioso amiga Angeles, muchísimas gracias por acercarnos tu tierra. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea. http://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/
ResponderEliminarHola Angeles:
ResponderEliminarPreciosas fotos nos muestras del Castro de la Muralla de Valdehúncar.
Con tu nítida descripción, nos has hecho visualizar un escenario atrás en el tiempo, como si desde una ventana fuéramos testigos mudos de nuestros antepasados, lástima de este abandono al que haces referencia, que no se haga nada por recuperar la historia que se come el pantano de Valdecañas.
Un abrazo.
Querida amiga Nines:
ResponderEliminarHas estado genial en esta entrada al transmitir todo el amor por la tierra que te vio nacer y en el recuerdo de los que allí vivieron se adquiere la condición de vida eterna. Sin duda vuelves con energía renovada para el alma y el cuerpo y eso sólo se consigue entre la naturaleza y disfrutando de las cosas sencillas, no por eso menos inmensas.
Un par de besos y feliz fin de semana.
Hola palabras al viento, gracias porque te encuentro en mi espacio muchas veces. Es cierto que Extremadura es muy bella, pero creo que también lo son todos los lugares de España. Si conectas con lo que te rodea, todo hace vibrar tu alma, porque en ella habita la chispa sin contaminar que nos hace ver la pureza y armonía hay en lo que nos rodea.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz fin de semana.
El imán de la tierra que se ha pisado, corrido, caído, en la niñez y pubertad nos atrae con una fuerza insuperable.
ResponderEliminarLos recuerdos son nuestras vivencias que, irrepetibles, sólo podemos reavivar estando en donde se fue feliz.
Quienes no saben de sentimientos van arrancando poco a poco el alma a la tierra y cuando queramos volver a sentirla no la encontraremos.
Siento lo que ocurre a tus lugares favoritos.
Un abrazo, Ángeles.
Gracias Pepe Lasala por llegar hasta mi espacio. Tú también nos acerca a tu tierra, con esas maravillosas imágenes, llenas de un misticismo desbordado que hace vibrar el alma en sentimientos de luz.
ResponderEliminarMis saludos para todo el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
Juan Antonio, es de veras una pérdida incalculable, allí hay bastantes restos de cerámica, y además sin coción, lo que lleva a preguntarnos si su datación no será mucho más antigua, cuando el "Homo Antecesor" del que procedemos aquí en Europa, aún no cocía al fuego los objetos que fabricaba.
ResponderEliminarPuedo decirte que para mí es una experiencia casi mística, el sentarme en el interior de esas dos cuevas que aún quedan, o el tener en mis manos esos restos de cerámica, hechos por hombres que nos precedieron en nuestra evolución.
Un abrazo
Hola Loli, es cierto que cuando llegas al castro y conoces su historia, es como adentrarte en una burbuja intemporal, imaginando y sintiendo la vida que hubo allí.
ResponderEliminarNo sé porque siento muchas veces esta necesidad casi dolorosa de volver siempre a mi tierra, y hollar con mis pasos los lugares que permanecen en la memoria de mi alma y allí.
Un abrazo y siempre mi cariño.
¡Que bien lo has dicho Antonio! volver a los lugares donde están nuestros orígenes, donde el recuerdo desde la distancia aún los hace más deseados y queridos. Aunque también " me pierdo" por otros lugares que nunca he visto, descubriendo rincones vírgenes que hechizan, y encadenan más a la tierra que me vio nacer.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz fin de semana
Gracias Mariam por visitar mi espacio, siempre tienes palabras de luz y paz, que cosquillean el alma y hacen luz en el sendero de la vida.
ResponderEliminarGracias ma amiga por ser así.
Un abrazo grande desde un lugar del corazón.