lunes, 19 de septiembre de 2011

OTOÑO ANDANTE Y MELANCÓLICO

El otoño ha llegado con las primeras luces de la alborada... despacio, despacito cuchicheando con el viento amigo que le precede...Viene desde el Universo Invertido donde tiene su palacio de bruñidos destellos en la más altas de las montañas donde habitan “Los Señores de la rotación de las estaciones” desde hace eones de años... Ha llegado en su blanco unicornio galopando con las crines al viento... sus pisadas se han escuchado durante toda la noche, como el eco de un murmullo de hechizos...trae su larga y mágica capa dorada con la que todo lo cubre y con su aliento de oro a comenzado a soplar tímidamente sobre la recién estrenada mañana... El sol le ha saludado emocionado, muy feliz...porque ya estaba muy cansado de tener que brillar tan fuerte y dar calor a toda la tierra durante el largo verano!
El otoño ha llegado...entonando su dulce melodía policromada de dorados ¡El alma de los hombres, de los árboles, de las plantas, de los arbustos le han reconocido, han escuchado la música que entona con su arpa y caramillo entre las ramas de los árboles, mientras danza revoleando para adormecer en una nana mágica todo lo que es y habita en la naturaleza, desde la noche ida de los tiempos... Llega sembrando sus luminosas mañanas vestidas con un tibio sol, donde se adormece la vida entre ecos de murmullos, y sus cortas tardes de rojizos atardeceres donde se puede escuchar el lamento quejumbroso de los árboles mientras dejan caer sus hojas en piruetas errantes todas de oro que forman un bruñido tapiz sobre la tierra.
El otoño ha llegado, esparciendo al viento la dulce serenidad de su esencia de recogimiento y paz... Los árboles dejan ver su alma de tonos ocres, sepias, rojos, amarillos, cárdenas, lilas, dorados...Quieren vestirse con sus trajes más bellos, para inmolarse, antes que llegue el invierno con sus fauces gélidas y sus noches oscuras de hielos, carámbanos y les clave sus colmillos desgarrando las hojas no tiradas...Por eso entonan un andante melancólico, antes de llegar al adagio del invierno, y danzan la fantasía de hojas al viento, entonando su canto de despedida y valsando al ritmo suave y etéreo de ingrávidas hojas de colores rojizos, dorados... en un adiós de oro.
El otoño ha llegado, es tiempo de serenidad, de reflexión, de desprenderse de lo viejo y caduco de nuestras vidas, de dejar atrás sueños huecos, vivencias dolorosas y volver a escuchar la voz del alma. El otoño es una pausa para la meditación... es un espacio de revelación y luz donde se ve el gran secreto de toda la naturaleza... Nacemos, y somos primavera llena de vida, vamos creciendo y somos cálidos, rientes, bulliciosos como el verano...vamos envejeciendo, y nos tenemos que desprender de muchas cosas inútiles que llevamos en la maleta de la vida y son tan sólo un lastre pesado que nos impide ser más felices y caminar con las manos abiertas a la esperanza. Y cuando morimos somos como el inerte y gélido invierno... en el eterno fluir del Universo.
¡...Me gusta, me gusta el otoño con sus días de viento loco, con su olor a lluvia, con sus blancas nubes que flotan sobre el cielo ensombreciendo las pardas sementeras, con sus olores a manzanas, a membrillos, a castañas asadas... Me gusta perderme en el campo enjoyado de oro, coger los rojos madroños, las setas y níscalos que crecen en la umbría del hayedo, ovillarme en el sofá leyendo un libro, pintar algunos de los cuadros que tengo sin terminar, tomar un café con amigos junto a la chimenea donde crepitan los troncos de encina y sobre todo dejar que mi alma vuele por otros cielos no pisados, para desprenderme de todo lo viejo que me habita y llenarme de nuevas energías... ¡porque al igual que la Naturaleza necesita al otoño... también lo necesitó yo...para vivir con el equilibrio de este mundo al que pertenezco! y poder caminar por los senderos de la vida renaciendo a la esperanza…viviendo mi andante melancólico, mientras llega el adagio del frío invierno...!

20 comentarios:

  1. Angeles,tu voz se oye cálida,pensativa y sensata mostrándonos los cambios de la naturaleza.El otoño nos abre sus brazos,invitándonos,como bien dices,a la reflexión intima y sincera para despojarnos de lo superfluo y lo caduco.Nos acaricia el alma con sus tonalidades,su frescura y su lluvia.Es una gozada recibir al otoño a través de tus letras y comprobar que,su sabiduría es tu misma sabiduría,que goza en el encuentro,al saberse juntas y agradecidas.
    Mi felicitación por tu hermoso,profundo y cultivado post.Mi abrazo siempre,maestra y poeta.
    M.Jesús

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  2. Que bonito recorrido de otoño, sobre todo por el aura esperanzador que lleva consigo.

    Saludos Ángeles.

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  3. salud a Otoño
    y salud a la vida
    que siempre es nueva...

    paz&amor

    Isaac

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  4. disculpa pero me parece que borre tu bloc por error un besazo este bloc tan bien es precio buenas noches

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  5. Mis felicitaciones a ti, M.Jesús, tienes un alma llena de luz, que se ve cuando escribes. El otoño me gusta por muchas cosas, no sólo son los maravillosos paisajes que podemos ver en la naturaleza, es sobre todo porque lo vivo y siento como una etapa de cambios, donde conecto más con mi alma, y sé que me tengo que desprender de lo viejo y doloroso, para renacer en primavera a un futuro lleno de armonías y esperanzas.

    Un abrazo con mi cariño.

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  6. Gracias Halcón Peregrino por detenerte en mi espacio y dejarme tu huella. Y es cierto lo que dices, el otoño está lleno de esperanzas, porque volverán renovadas y llenas de luz en primavera.

    Mi saludo para ti.

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  7. SÓLO EL AMOR ES REAL...bonito nick, y la esencia de su alma mucho más. Creo que el otoño está tambien lleno de amor, porque nos amamos, cuando tenemos la valentía de desvestirnos de lo que ya no nos sirve para nada, aunque esté muy pegadito a nuestra alma.

    ¡Un saludo entre piruetas de hojas de oro!

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  8. Hola Hadama, por este blog puedes pasar a mi otro blog, Huellas del alma, tan sólo tienes que buscarle en el principio de este, clicar en él, y ya estás en el otro. Por eso aunque hayas borado la dirección del otro blog, no importa, desde este, con un clic vas al otro, es así de fácil, hazlo y verás como llegas a Huellas del alma.

    Mi cariño siempre.

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  9. Has dejado tu refugio para recibir al otoño con esta bella descripción.
    Bienvenida después de este largo descando .
    Un abrazo

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  10. Gracias Chelo, sí, he abandonado mi refugio donde tejia sueños de libertad... para volver a la gran ciudad y retomar mi trabajo. Llego con el alma llena de vitaminas, pero me parece que no serán suficientes, porque como parece presentarse el nuevo curso, creo que se acabarán muy pronto.

    Mi cariño con un gran abrazo.

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  11. Querida Ángeles, has encontrado las palabras perfectas para hablar de la nueva estación, hasta las borrascas se tornan en tu pluma en fina lluvia.
    Te deseo ánimos en tu día a día de labor y que se hagan realidad tus bonitos planes para las tardes festivas del otoño.
    Un fuerte abrazo.

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  12. Has dibujado con palabras toda la belleza de colores con que se viste el otoño. Me ha gustado tu reflexión sobre lo que el otoño puede significar en la vida de las personas.
    Tienes razón que debemos desprendernos, como hacen los árboles, de aquello que ya no nos sirve en la vida.
    Mi admiración y un saludo.

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  13. El otoño, como transición entre el agóbiate calor del verano y el crudo frio del invierno, es una estación donde hay que apearse (y así lo hago), para para reflexionar, tomar en cuenta tus palabras, y coger impulso para seguir adelante.
    Un abrazo

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  14. Querida Loli, gracias por estar... el otoño es una pausa en todo lo que habita y es, no sólo en el paaisaje, que es lo más llamativo con su gama policromada de colores. Creo que nuestra alma necesita tambien el otoño, para meditar, tirar lo viejo y caduco de nuestras vidas, y abrir los brazos a nuevos sueños e ilusiones.

    Siempre mi cariño con una lluvia de felicidad.

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  15. Hola Hacónrojo, gracias por llegar hasta mi blog con la huella de tus palabras... El otoño para las personas, creo que es una etapa para desprenderse de lo que no nos sirve... y dejar en libertad nuevos amaneceres y despertares.

    ¡Què el otoño, te lleve en un remolino de hojas de oro, mi sincero saludo!

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  16. Amigo José, has captado el mismo mensaje del otoño que yo siento y vivo... ¡Pararse, para luego continuar...! Y es mágico cuando te pierdes por una naturaleza entintada de oros, cobrizos, sepias... y sobre todo con el alma desnuda, para llenarse de su luz.

    Un abrazo, en brazos del otoño.

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  17. Qué belleza de lugar, no lo conozco, pero leyendo tu entrada me dan muchas ganas de visitarlo. Y más ahora en el otoño. Preciosas fotos, hermoso texto, divino lugar. Muchas gracias, amiga.

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  18. Hola Julie, gracias a ti por dejarme tus lindas palabras... es cierto que el otoño parece una estación aburrida y triste, cuando esto no es cierto, porque si miramos con los ojos del alma... se agiganta con una belleza de policromados colores, y una serenidad donde se acrisolan vivencias y sentimientos.

    ¡Qué una lluvis de felicidad te acaricie el alma!

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  19. El otoño siempre trae el reposo de un largo verano. Como narras esta etapa de la naturaleza, hace que todo tenga unos colores nítidos bañados de oro. No me gusta mucho el otoño, pero ahora al leer tu relato, me parece que lo veo con otra perpectiva. Gracias por despertar nuevos sentimientos dormidos.

    Un abrazo Ángeles.

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  20. Yo creo, palabras al viento, que la estación del otoño es imprescindible en este planeta que habitamos. La naturaleza necesita desprenderse de lo viejo que ya no sirve, y reposar, para poder resugir en primavera. Y si nosotros formamos parte del mismo planeta, estamos inmersos en el mismo proceso... desprendernos de lo que no nos sirve, y resurgir en la primavera con las manos abiertas a la esperanza.

    Un abrazo para ti, y gracias por detenerte en mi espacio.

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